Geriátricos o residencias ancianos Valencia: Claves para elegir

Si buscamos geriátricos o residencias ancianos Valencia, tenemos la opción de un centro público o privado, si bien lo más importante es que la residencia elegida se adapte a las necesidades, y cuidados en caso de problemas de salud, de la persona mayor. En los casos en los que la enfermedad se agrava, y los médicos y cuidadores desaconsejan que continúe viviendo en el domicilio familiar, las residencias son la opción para prestar a la persona mayor los cuidados médicos que requiere. No obstante, no podemos concebir las residencias solo como un lugar al que acudir cuando, a partir de una determinada edad (los 65), empiezan los achaques o problemas de salud.

De entrada, y los geriátricos o residencias ancianosValencia no son una excepción, los centros están adaptados a las diferentes grados de dependencia de los residentes. Así, las residencias son una opción para las personas que, aunque se pueden valer por sí mismos, prefieren vivir en un centro donde cuenten con ayuda para actividades cotidianas como las comidas o la limpieza de la habitación. En estos casos, la persona mantiene su total independencia, con la única diferencia de vivir en una residencia.

Las residencias de mayores también acogen a las personas que, debido algún tipo de problema de salud, han perdido parte de su movilidad y no pueden valerse por sí  mismas para realizar las tareas cotidianas. En otros casos, los residentes requieren unos cuidados médicos especiales, debido al tipo de enfermedad o problema de salud diagnosticado.

Para acceder a los centros hay que cumplir una serie de requisitos (como el ser mayor de 65 años o estar empadronado en la comunidad autónoma en la que solicita plaza para residir, entre otras). Si estamos buscando residencia, antes de nada hay que informarse sobre el tipo de centros y las condiciones de acceso, ya que suelen variar entre diferentes regiones.

¿Qué tipo de información necesitamos para seleccionar las residencias de ancianos? Además de sus instalaciones –tipo de habitaciones, servicios comunes, espacios exteriores-, es esencial conocer el tipo de atención sanitaria y los cuidados que reciben las personas mayores –especialmente cuando se requieren por motivos de salud unos cuidados específicos-, los servicios complementarios (rehabilitación, talleres, actividades de ocio y tiempo libre…) y, muy importante, el horario de visitas (es importante que la persona pueda recibir visitas en cualquier momento, así como llamadas). Son algunos de los aspectos esenciales. Lógicamente, en función de los servicios que preste la residencia las tarifas serán mayores o menores. La primera diferencia en las tarifas viene dada por la titularidad de las plazas (públicas o privadas). Cada residencia, a partir de ahí, establece una serie de tarifas en función del tipo de asistencia a prestar.